
Un sueño... anoche viví un sueño, viví una ilusión, viví uno de mis sueños, ya que, el conjunto de mis sueños, es mi gran sueño; romper lo establecido, ahuyentar la hipocresía, buscar la libertad, conseguir la armonía de la humanidad, hundir el capital, vivir en libertad, igualdad y fraternidad y un sinfín de más sueños a realizar.
Pero ayer, fue uno distinto, uno distinto... fue ver a cuatro energumenos encima de un escenario, concediendose ellos mismos con su actuación el nombre de reyes, de lo que quieran... de la musica, del rock, de lo que les de le gana, lo que te ofrecen durante tres horas no es más que desenfreno, locura, paz, armonía, sentimientos, poesía, nervios, tranquilidad, antítesis en cada canción, mientras que en una estrofa te llenaba de poesía, en otra te aceleraba tu sistema hormonal mediante acordes desenfrenados llenos de acústica y sentimiento cargado de fuerza.
Nada más salir, comienza pronunciando "Me cuelgo de su pelo, me engancho de su miel,me encuentro con mi hada, que esta loca también,he vuelto a la andadas, he vuelto a enloquecer, lo vi escrito en la luna, luna creciente" haciendo soltar las adrenalinas producidas del retraso del comienzo, pero que nadie se acordó en cuanto comenzó a entonar esta reliquia, siguió con temas llenos de poesía, otros más radicales, otros más tranquilos, otros más instrumentales, toco todo su repertorio, no se dejó ni una, no olvido por lo que cada una de las personas que habían aportado una parte de su trabajo fueron a ver tan increíble puesta en escena, y no, no defraudaron, vinieron como reyes y se fueron como reyes, los reyes del rock.
Se despidieron a lo grande con mi letra preferida de este grupo, cargada de rebeldía, de libertad, y de escapar de todo lo oscuro de esta sociedad... sin más
"Quisiera que mi voz fuera tan fuerte que a veces retumbaran en las montañas y escuchárais las mentes-social-adormecidas las palabras de amor de mi garganta. Abrid los brazos, la mente y repartíos que sólo os enseñaron el odio y la avaricia y yo quiero, que todos como hermanos, repartamos amores, lágrimas y sonrisas.De pequeño me impusieron las costumbres me educaron para hombre adinerado, pero ahora prefiero ser un indio, que un importante abogado.Hay que dejar el camino social alquitranado,porque en él se nos quedan pegadas las pezuñas,hay que volar libre, al sol y al viento, repartiendo el amor que tengas dentro".
Pero ayer, fue uno distinto, uno distinto... fue ver a cuatro energumenos encima de un escenario, concediendose ellos mismos con su actuación el nombre de reyes, de lo que quieran... de la musica, del rock, de lo que les de le gana, lo que te ofrecen durante tres horas no es más que desenfreno, locura, paz, armonía, sentimientos, poesía, nervios, tranquilidad, antítesis en cada canción, mientras que en una estrofa te llenaba de poesía, en otra te aceleraba tu sistema hormonal mediante acordes desenfrenados llenos de acústica y sentimiento cargado de fuerza.
Nada más salir, comienza pronunciando "Me cuelgo de su pelo, me engancho de su miel,me encuentro con mi hada, que esta loca también,he vuelto a la andadas, he vuelto a enloquecer, lo vi escrito en la luna, luna creciente" haciendo soltar las adrenalinas producidas del retraso del comienzo, pero que nadie se acordó en cuanto comenzó a entonar esta reliquia, siguió con temas llenos de poesía, otros más radicales, otros más tranquilos, otros más instrumentales, toco todo su repertorio, no se dejó ni una, no olvido por lo que cada una de las personas que habían aportado una parte de su trabajo fueron a ver tan increíble puesta en escena, y no, no defraudaron, vinieron como reyes y se fueron como reyes, los reyes del rock.
Se despidieron a lo grande con mi letra preferida de este grupo, cargada de rebeldía, de libertad, y de escapar de todo lo oscuro de esta sociedad... sin más
"Quisiera que mi voz fuera tan fuerte que a veces retumbaran en las montañas y escuchárais las mentes-social-adormecidas las palabras de amor de mi garganta. Abrid los brazos, la mente y repartíos que sólo os enseñaron el odio y la avaricia y yo quiero, que todos como hermanos, repartamos amores, lágrimas y sonrisas.De pequeño me impusieron las costumbres me educaron para hombre adinerado, pero ahora prefiero ser un indio, que un importante abogado.Hay que dejar el camino social alquitranado,porque en él se nos quedan pegadas las pezuñas,hay que volar libre, al sol y al viento, repartiendo el amor que tengas dentro".